INGREDIENTES:

  1. Seis cucharadas de arroz

  2. Dos litros de leche

  3. Nueve cucharadas de azúcar

  4. Dos huevos

  5. Una corteza de limón

  6. Un palo de canela

  7. Canela molida

  8. Sal

 

PREPARACIÓN:

Poner el arroz en una cazuela antiadherente y añadir agua fría hasta que lo cubra, junto con una pizquita de sal. Poner al fuego y, cuando empiece a hervir, contar cinco minutos, que es cuando se deberá haber consumido el agua. Si no ha sido así, avisar a las autoridades pertinentes o aguardar un momentito más.

Echar en la cazuela leche hasta que cubra el arroz y bajar el fuego al mínimo. Añadir el limón y la canela en rama, y remover constantemente mientras el arroz se va poniendo cremoso. Si no se pone cremoso... no, mejor ni lo imaginamos.

Seguir cociendo a fuego muy lento, añadiendo de vez en cuando leche, según se va consumiendo. Hay que remover a menudo. La operación durará unas dos horas, sí, habéis leído bien, DOS horas. Quizá no habría sido tan mala idea comprar una tarta para el postre, ¿eh?

Cuando ya esté incorporada toda la leche, añadir el azúcar, dar unas vueltas más para que se reparta bien y retirar del fuego. Servir frío, en cuencos individuales, espolvoreado con canela.

 

 


http://sharisdesigns.com/